Louis Roederer Cristal Rosé 2012 Estuchado

Louis Roederer Brut Cristal Rosé 2012 es un cuveé rosado elaborado con Pinot Noir y Chardonnay, con un 15% de vinificación en madera, hecho por la bodega Louis Roederer en la D.O. Champagne.

El año 2012 planteó desafíos considerables y sensibles para la región de Champagne. No obstante, estas dificultades a menudo desembocan en momentos trascendentales. Las cosechas disminuidas, resultado de los imprevistos climáticos, combinados con las condiciones continentales al final de la temporada, posibilitaron el logro de un nivel de madurez excepcional e histórico. Este acontecimiento condujo a vinos amplios, vigorosos y con una sólida estructura, que se equipararon con las mejores cosechas de Champagne.

Para la producción de sus champagnes rosados, Louis Roederer ha desarrollado a lo largo del tiempo un método completamente singular en la región de Champagne. Este proceso, conocido en la bodega como "la infusión," permite extraer el carácter jugoso y maduro de la variedad de uva Pinot noir, al mismo tiempo que se conserva una impresionante frescura. En este método, una porción del jugo de las uvas Chardonnay se incorpora a una maceración de Pinot noirs, permitiendo que fermenten juntos y logrando una integración perfecta. La cantidad de azúcar añadida (dosaje) es de 8 gramos por litro.

Nota de Cata de Louis Roederer Brut Cristal Rosé 2012

Tono de rosa sutil con destellos dorados. Burbujeo uniforme y excepcionalmente fino. Aroma discreto y de una elegancia inusual. Los matices delicados y evanescentes se entrelazan de forma tan compleja que resulta complicado describirlos. Invita a tomarse el tiempo necesario para sumergirse en este vino que se revela a su propio ritmo. Ejerce un control sobre el tiempo, desvelando primero notas ácidas sutiles, frescas y precisas: cáscara de cítricos, yuzu, frutos del bosque, mandarina, frambuesa, fresas silvestres; seguidas de toques tostados y almendrados y, por último, notas frescas y vegetales de verbena y bergamota. En boca, es ligero, animado por burbujas de una delicadeza extraordinaria que aligeran la estructura y la textura frutal. La impresión predominante es de serenidad, con la delicadeza de la fruta fresca y la fuerza de la frescura ácida de la creta. El final revela una espléndida prolongación evasiva.